Cualquier persona que alguna vez haya contratado algún plan de hosting de seguro se ha encontrado por lo menos una vez en esta situación. Tratas de ingresar a tu sitio web, el cual hasta ayer funcionaba sin problemas, pero ahora no se ve online, es decir, está completamente fuera línea.
¿Qué sucede aquí? Por lo general, pueden suceder 3 cosas:
-Hay un problema del lado del servidor.
-Hay un problema con tu conexión.
-Olvidaste pagar el servicio.
La tercera posibilidad puede pasar incluso más seguido de lo que puedan creer, pero vamos a centrarnos en las otras dos.
-¿Hay un problema con tu conexión?
Verificar esto es muy fácil. Primero que nada, ingresamos a un sitio como HostTracker.com o InternetSupervision.com (si no podemos ingresar a ningún sitio, es obvio que el problema está de nuestro lado). Desde allí cargamos nuestro sitio web. Si vemos que la página indica que nuestra web carga desde el resto del mundo, entonces el problema está en nuestra conexión.
En estos casos lo más probable es que nuestra IP haya sido bloqueada por el firewall del server (los bloqueos suelen suceder por intentos de acceso masivos o fallidos a cuentas de correo, FTP, etc.). ¿Qué podemos hacer? Si tenemos una conexión dinámica, podemos reiniciarla a efectos de obtener una nueva IP. Si la IP es fija, debemos contactar a nuestro proveedor de alojamiento para que «limpie» nuestra IP.
Si aún con la IP fuera de los registros del cortafuegos no logramos acceder, es hora de contactar a nuestro proveedor de Internet.
-¿Hay un problema del lado del servidor?
Verificar esto es más fácil aún. Si al comprobar el estado de nuestro sitio desde las páginas de monitoreo vemos que el mismo se muestra offline desde todo el globo, el problema está del lado de la empresa de hosting. Es hora de preguntarles qué va mal con el servidor.